LA VIDA DE PI, de Ang Lee: UN TIGRE EN MI BARCA
Calificación: 6/10.
A un director multipremiado, que lo mismo vale para un roto que para un descosido y cuyas primeras películas, El banquete de boda y Comer, beber, amar me agradaron un poco más de lo justo en la época de Jarmusch, Hal Hartley y Kieslowski, le elogia James Cameron (¡la primera vez!), dando a entender que es de los pocos, o el único, que ha entendido el 3D como una forma nueva de narrativa y no como un reclamo barato, dicho esto en sentido figurado, para arrimar al público a las salas de cine.
Y, no obstante, La vida de Pi no aporta ninguna novedad en lo que a contar historias se refiere, y eso a pesar de un interesante requiebro final que pone en duda lo que hemos visto. La cosa es más o menos esta: un personaje que tiene una vivencia única en su haber se sienta con un escritor bloqueado y se la relata, y lo que vemos en pantalla es la vivencia misma desde el punto de vista de ese personaje. A Lee no le importa, al principio, sonar a Slumdog Millonaire, Pasaje a la India, Un lugar para soñar o incluso –y esto le honra- a El río, de Renoir, porque se hace fuerte en la segunda parte, cuya concomitancia con cualquier cuento de náufragos habido y por haber resultará superficial, con la posible excepción de aquella con Tom Hanks dirigida por Zemekis.
Sin hacer demasiado spoiler, el protagonista pasa cerca de cuatro meses en una barca con un tigre de Bengala, y esta situación única le sirve a Lee para desplegar un poderío visual sobresaliente. El coreano elige un motor narrativo más clásico imposible para dar soporte a unas imágenes, eso sí, de una belleza majestuosa y casi singular. Habrá quien pueda argüir que, a pesar de tanto 3D, resultan más innovadoras películas de hace medio siglo, pero es lo que demanda el gran público: que se lo den todo machacadito, aunque con planos a los que no tenga alcance sin pagar la entrada ni el suplemento de las gafas.
Porque hablamos de un cineasta mayoritario, y ahí ya habrá quien se lo reproche y quien no, quien prefiera el caleidoscopio narrativo en vez del visual, pero me temo que se trata de una mera cuestión de gustos. No en vano, La vida de Pi sirve para los críos en Navidades o para las parejas domingueras pazguatas, y eso no se puede decir, por ejemplo, de Wes Anderson (Moonrise Kingdom), de Jason Reitman (Young Adult) o de Whit Stillman (Damiselas en apuros, aquí los subtítulos ), por mucho que estos filmes resulten eminentemente superiores. Cada cual que escoja…
* LA VIDA DE PI (2012). DIRECTOR: Ang Lee. INTÉRPRETES: Suraj Sharma, Irrfan Khan, Rafe Spall, Gérard Depardieu, Tabu. NACIONALIDAD: EE. UU. La película se estrena mañana 30 de noviembre. Sin enlaces de descarga por el momento.
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