Coincide que estos días he estado leyendo un libro sobre Ed Wood que ha aparecido en las tiendas, junto con otros libros de cine, por un precio irrisorio. Y me he acordado de que en esta nueva etapa del blog no había hablado de él.
Casi siempre que se habla de Wood, incluso en el libro mencionado, sale a relucir el mismo tópico: su figura sirve para contrarrestar la moralina, omnipresente en nuestra vida gracias además al cine americano, del “puedes conseguir todo lo que te propones”. Wood, lleno de grandes ideas pero sin mayores conocimientos sobre técnica cinematográfica, intentó ser Orson Welles, pero solo ha conseguido, además en la posteridad, pasar a la Historia del Cine como el peor director de todos los tiempos. Sin Wood ni su obra magna Plan 9 From Outer Space todos pensaríamos que podemos destacar en los más diversos campos en virtud de nuestro tesón y optimismo.
Por descontado, estoy radicalmente en desacuerdo con ese lugar común. Ed Wood fue, a su manera, un genio. Puede que sus películas nunca acabasen diciendo lo que su autor pretendía, pero afirmar que son inigualables se queda corto. Poniendo de ejemplo las más conocidas, Glenn or Glenda es la serie B más cercana al cine de vanguardia (surrealismo, escritura automática) que se ha hecho jamás, y Plan 9 es la expresión cinematográfica definitiva de eso que los españoles llamamos «hacer de la necesidad virtud»: jamás la falta de medios, de técnica y hasta la muerte de una estrella (Bela Lugosi) se habían suplido ni se suplirán con una imaginación tan portentosa y delirante. Se trata de la película sobre invasiones extraterrestres más singular que se ha hecho nunca.
Sin embargo, hay una etapa de Wood no tan conocida –sobre todo porque no aparece en la hagiografía de Tim Burton-: la de sus años de decadencia y de películas sexplotation. Más adelante, Wood se pasaría al porno.
Su película más conocida de la etapa sexplotation es Orgy of The Dead, que no obstante está dirigida por un tal A. C. Stephen -en realidad Stephen C. Apostolof-, pero Wood la escribió a la vez que hizo labores de producción y casting. El guión, curiosamente, se convertiría después en una de esas novelas baratas o pulp con las que tanto se prodigó el director de Sinister Urge, y personalmente me pregunto cómo logró esto, si la gran mayoría del metraje son bailes de strippers (diez, para ser exactos).
El argumento no podría ser más estrafalario: una pareja que ha tenido un accidente de coche es raptada por una momia y un hombre lobo y obligada a presenciar una serie de bailes eróticos con los que se agasaja al Emperador de las Sombras (el Criswell de la “compañía estable” de Wood).
Las curiosidades acerca de Orgy of The Dead son casi inacabables. Por ejemplo, una de las strippers, Pat Barrington, dobla su papel y se contempla a sí misma “actuar” y después ser cubierta de un baño dorado como las víctimas del Goldfinger de James Bond. A Criswell se le ve leer descaradamente su texto, y se cuenta que lloró al contemplarse en pantalla en esa tesitura. Fawn Silver (foto superior) tuvo que hacer un papel destinado a Vampira, que se negó a participar en el filme aduciendo el suicidio profesional. A John Andrews se le mueve la careta de hombre-lobo y se le ve su piel humana, lo cual no llama demasiado la atención si tenemos en cuenta otros defectos del filme, como los fallos de raccord marca de la casa (en un plano es de noche, en el siguiente de día, luego de noche otra vez…).
Empero, esta nudie movie posee uno de los decorados con más encanto de toda la Historia del Cine y, una vez que se acepta su falta de acción, resulta francamente divertida. Y no sólo eso: la ingenuidad de sus monstruitos, sus fallos técnicos y su superpoblación mamaria no llegan a ocultar un contenido más perverso de sadomasoquismo y necrofilia. De hecho, más adelante y para su infame obra porno Necromania –prometo hablar de ella en otra entrada-, Wood recuperaría la imagen de la chica desnuda besando una calavera, aunque llevada más lejos…
Orgy of The Dead obtuvo un notable éxito de taquilla, seguramente debido a su eslogan de promoción: “¿Es Vd. heterosexual?”.
De aquí damos un salto de casi diez años, aparte de al otro lado del Atlántico y a otra figura mítica de la ciencia-ficción y el terror: Jacinto Molina, alias Paul Naschy. Nunca sabremos si él, el director José Luis Merino o el productor que encargó el fime, Enrico Colombo, habían visto la película de Apostolof y Wood, pero muy poco o nada tiene que ver con ella.
La orgía de los muertos es otro producto arquetípico del fantaterror español, hoy en día tan reivindicado, pero tanto, que se ha llegado a su sobrevaloración. De hecho, si pensamos en un filme de zombis, magia negra y espiritismo con una breve y frustrada escena de necrofilia que protagoniza Naschy, dos actrices bastante guapas (Dyanik Zurakowska y Maria Pia Conte) y el Pirineo catalán simulando Escocia, no se explica cómo el filme puede llegar a resultar tan tedioso y hasta exasperante.
Merino fue un artesano que probó suerte en toda clase de géneros y subgéneros (western, comedia, aventuras, etc.). Hay cierta corrección formal, dejando aparte algunos chanfarrinones de guión, en el filme, y eso es precisamente lo que le condena. La influencia de la Hammer, que mi adorado Jess Franco llamaba “el terror para viejecitas”, es tan patente como excesiva, y la estructura detectivesca la hace demasiado envarada, aunque exista algún momento aislado de valioso despendole. Por otra parte, todos los efectos especiales y maquillajes resultan de una cutrez casi amateur.
Y, sin embargo, La orgía de los muertos posee mucha mejor reputación cinematográfica que Orgy of the dead. A mí no me cabe duda de cuál me resulta más divertida. En cualquier caso, queridos lectores, ahí van como siempre los enlaces para que vosotros también podáis disentir de la opinión mayoritaria… o no.
* ORGY OF THE DEAD (1965). DIRECTOR: Stephen C. Apostolof (AKA A.C. Stephen). INTÉRPRETES: Criswell, Fawn Silver, Pat Barrington, William Bates, Mickey Jines, Barbara Nordin, Bunny Glaser. NACIONALIDAD: EE UU. Calificación: 5/10. Puedes descargar la película aquí. Sin subtítulos disponibles, aunque no son en absoluto necesarios para entenderla.
* LA ORGÍA DE LOS MUERTOS (1973). DIRECTOR: José Luis Merino. INTÉRPRETES: Paul Naschy, Stelvio Rosi, María Pía Conte, Dyanik Zurakowska, Pasquale Basile, Gérard Tichy, Aurora de Alba, Isarco Ravaioli, Carla Mancini. NACIONALIDAD: Ita.-Esp. Calificación: 4/10. Puedes ver online y descargar la película aquí.
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